Otto H. Warburg, fisiólogo alemán, es mejor conocido por haber descubierto cuál era la causa del cáncer. Por este, entre otros descubrimientos, se hizo merecedor al Premio Nobel. Gracias a él sabemos que los niveles de pH de nuestro cuerpo son fundamentales a la hora de prevenir el cáncer.
En sus investigaciones, Warburg planteó que las células cancerosas tienden a desarrollarse cuando hay una carencia de oxígeno. Él dijo que “Todas las células normales necesitan del oxígeno, pero las células cancerosas pueden vivir sin oxígeno”. Así, si una célula normal es privada del 35% de su oxígeno durante 48 horas, se puede transformar en una célula de cáncer. De esto se concluye, según Warburg, que ante una abundancia de oxígeno las células cancerosas tienden a desaparecer, y esto ocurre cuando el pH de nuestro cuerpo se encuentra en niveles alcalinos. Se debe evitar, por tanto, que el cuerpo tenga niveles de pH ácidos.
Desafortunadamente, la alimentación actual de las personas no es la adecuada, pues favorece la excesiva creación de ácido en nuestro organismo. De modo natural, nuestro cuerpo tiene un pH ligeramente alcalino, pero la dieta puede acidificarlo. La acidez en nuestro organismo puede llegar a generar problemas, además del cáncer, como osteoporosis, enfermedades cardiovasculares, diabetes y enfermedades estomacales.
Médicos e investigadores seguidores de Warburg han dicho que la clave está en evitar alimentos como los azúcares refinados, los cereales refinados, los transgénicos y, en sí, todo lo que no está naturalmente procesado. Muchas personas que tienen pésima salud y una baja calidad de vida no se dan cuenta de que ellas mismas pueden estar propiciando sus enfermedades gracias a una dieta inadecuada. Una buena parte de los malestares actuales, incluyendo la infección por parásitos, virus y bacterias, podría deberse a unos niveles de pH demasiado ácidos.
Los expertos han descubierto un remedio totalmente natural para equilibrar el pH y así evitar el cáncer y otras enfermedades, y lo mejor es que es muy sencillo de conseguir y preparar.
Aquí te damos la receta.
Ingredientes:
1/3 de una cucharada de bicarbonato de sodio.
2 cucharadas de jugo de limón.
2 cucharadas de vinagre de manzana.
Preparación:
Servir agua fría en un vaso pequeño y revolver bien todos los ingredientes. Notarás que la mezcla comienza a burbujear, esto es por la reacción del bicarbonato de sodio con los otros dos elementos. Ahora bébete la mezcla. Hazlo diario por quince días y comenzarás a ver resultados sorprendentes en tu salud.
Fuente: misterio y conspiraciones