Hasta el día de hoy todavía se repiten, de una generación a otra, una serie de mitos y leyendas urbanas que se han instalado en el inconsciente colectivo, pero que la ciencia y la historia se han encargado de desmentir. ¿La Gran Muralla china se puede ver desde la luna? ¿Es el Monte Everest la montaña más alta de la tierra? .
1) La gran Muralla China es la única construcción humana visible desde el espacio:
La gran Muralla China, construida entre el siglo V a. C. y el siglo XVI, por cerca de 800 mil obreros, tiene más de 21 mil kilómetros de largo, atravesando 15 provincias, regiones autónomas y municipalidades de ese país oriental. Elegida en el año 2007 como una de “Las Nuevas Siete Maravillas del Mundo Moderno”, en el libro de Richard Halliburton, “Second Book of Marvels”, publicado en 1938, se afirmaba que era la única construcción humana visible desde la Luna, creencia que a partir de entonces comenzó a ser repetida por todo el mundo, hasta convertirse en una suerte de leyenda urbana. Sin embargo, la Gran Muralla, que mide de 6 a 7 metros de alto y tiene de 4 a 5 metros de ancho, y tiene casi el mismo color que el suelo que la rodea, en realidad no puede ser vista desde la luna.
El fallecido astronauta norteamericano Neil Armstrong, el primer hombre en pisar nuestro satélite natural, afirmó que “no creo que, por lo menos con mis ojos, hubiera alguna construcción humana visible para mí. Y no he conocido a nadie que me haya dicho que ha visto la Muralla China desde la órbita terrestre. Le he preguntado a mucha gente, particularmente a astronautas del transbordador, que han orbitado varias veces sobre China durante el día, y todos aquellos con los que he hablado me han dicho que no han podido verla”. En mayo de 2004, en todo caso, la NASA anunció oficialmente que la Gran Muralla China no era visible desde el espacio sin ayuda.
2) Albert Einstein era un mal estudiante:
La idea de que Albert Einstein, el genio que revolucionó el siglo XX con su famosa Teoría de la Relatividad, era un mal estudiante parece haber nacido de una confusión que cometió uno de sus primeros biógrafos, al investigar su etapa escolar en Aarau, Suiza. Cuando Einstein, en 1895, llevó a cabo el examen de acceso al Instituto Politécnico Federal de Zurich, lo suspendió, pero aparentemente lo hizo porque el examen incluía una prueba en francés, idioma que Einsten no dominaba.
Al regresar a la secundaria para preparar de nuevo el examen de ingreso, Einstein comenzó a sacar notas de 1 y 2, sin embargo, hay que consignar que en ese momento en la escala de notas que regía en aquel momento 1 era la máxima nota, y 6 la mínima. Más tarde, en un proceso de estandarización e internacionalización de notas, el instituto alteró las notas de forma inversa (1 comenzó a ser la mínima y 6 la máxima), y a partir de entonces Albert Einstein comenzó a sacar 5 y 6. Este cambio, con toda probabilidad, fue el que pudo confundir a los historiadores, quienes, al ver las notas de 1 y 2 de Einstein, las consideraron como mediocres, cuando en realidad era totalmente al revés. Otro hecho que reforzó este falso mito fue que Einstein no empezó a hablar hasta los 3 años y desde niño tenía cierta dificultad para expresarse.
3) El pelo y las uñas siguen creciendo después de que una persona ha muerto:
Los científicos afirman que cuando morimos el corazón se detiene, la sangre deja de fluir y el oxígeno deja de llegar a nuestro cuerpo, lo que detiene la producción de nuevas células y, por ende, el crecimiento de las uñas y el cabello. Cuando el oxígeno deja de llegar a nuestro organismo, se produce la evaporación del agua, que supone el 80% del contenido de nuestra piel. En otras palabras, nuestro cuerpo se deshidrata, por lo que comienza a encogerse. Así, no es que las uñas crezcan, sino que la piel que las rodea se retrae, a medida que se deshidrata, haciéndolas parecer más largas. Lo mismo ocurre con la piel de la barbilla.
4) El ejercicio es la mejor forma de perder peso:
Cuando se acerca la temporada de verano, son muchos, especialmente los que tienen algunos kilos de más en su cuerpo, los que corren a inscribirse a algún gimnasio para ponerse en forma y bajar rápidamente de peso. Sin embargo, los científicos aseguran que la manera más efectiva de bajar de peso es simplemente consumir sólo las calorías que el cuerpo realmente requiere (el cuerpo posee el llamado metabolismo basal, que es el mínimo de calorías que el cuerpo necesita). Por ello, evitar cualquier tipo de exceso alimenticio es la base para perder peso, aunque el ejercicio físico también puede ayudar bastante en este objetivo. Por lo demás, todas las dietas se basan en el mismo principio: ingerir menos calorías de las que una persona gasta. Lo único en lo que varían es en la manera de crear ese déficit.
5) El Monte Everest es la montaña más alta del mundo:
El Monte Everest, localizada en la cordillera de Mahalangur Himal, en el continente asiático, en la frontera entre China y Nepal, tiene la fama de ser la cumbre más alta del mundo gracias a sus 8.848 metros de altura. Una altura que en todo caso palidece si lo comparamos con el Mauna Kea, un volcán inactivo de la isla de Hawái que emerge en medio del Pacífico.
Si bien sobre el nivel del mar sobresalen sus 4.207 metros de altura, la mayor parte de la estructura del Mauna Kea (6.000 metros) se oculta bajo el agua. Por eso, la altura total medida desde la base submarina del Mauna Kea sería de 10.207 metros, casi 2.000 metros más que el Monte Everest.
Fuente:
•Héctor Fuentes
1) La gran Muralla China es la única construcción humana visible desde el espacio:
La gran Muralla China, construida entre el siglo V a. C. y el siglo XVI, por cerca de 800 mil obreros, tiene más de 21 mil kilómetros de largo, atravesando 15 provincias, regiones autónomas y municipalidades de ese país oriental. Elegida en el año 2007 como una de “Las Nuevas Siete Maravillas del Mundo Moderno”, en el libro de Richard Halliburton, “Second Book of Marvels”, publicado en 1938, se afirmaba que era la única construcción humana visible desde la Luna, creencia que a partir de entonces comenzó a ser repetida por todo el mundo, hasta convertirse en una suerte de leyenda urbana. Sin embargo, la Gran Muralla, que mide de 6 a 7 metros de alto y tiene de 4 a 5 metros de ancho, y tiene casi el mismo color que el suelo que la rodea, en realidad no puede ser vista desde la luna.
El fallecido astronauta norteamericano Neil Armstrong, el primer hombre en pisar nuestro satélite natural, afirmó que “no creo que, por lo menos con mis ojos, hubiera alguna construcción humana visible para mí. Y no he conocido a nadie que me haya dicho que ha visto la Muralla China desde la órbita terrestre. Le he preguntado a mucha gente, particularmente a astronautas del transbordador, que han orbitado varias veces sobre China durante el día, y todos aquellos con los que he hablado me han dicho que no han podido verla”. En mayo de 2004, en todo caso, la NASA anunció oficialmente que la Gran Muralla China no era visible desde el espacio sin ayuda.
2) Albert Einstein era un mal estudiante:
La idea de que Albert Einstein, el genio que revolucionó el siglo XX con su famosa Teoría de la Relatividad, era un mal estudiante parece haber nacido de una confusión que cometió uno de sus primeros biógrafos, al investigar su etapa escolar en Aarau, Suiza. Cuando Einstein, en 1895, llevó a cabo el examen de acceso al Instituto Politécnico Federal de Zurich, lo suspendió, pero aparentemente lo hizo porque el examen incluía una prueba en francés, idioma que Einsten no dominaba.
Al regresar a la secundaria para preparar de nuevo el examen de ingreso, Einstein comenzó a sacar notas de 1 y 2, sin embargo, hay que consignar que en ese momento en la escala de notas que regía en aquel momento 1 era la máxima nota, y 6 la mínima. Más tarde, en un proceso de estandarización e internacionalización de notas, el instituto alteró las notas de forma inversa (1 comenzó a ser la mínima y 6 la máxima), y a partir de entonces Albert Einstein comenzó a sacar 5 y 6. Este cambio, con toda probabilidad, fue el que pudo confundir a los historiadores, quienes, al ver las notas de 1 y 2 de Einstein, las consideraron como mediocres, cuando en realidad era totalmente al revés. Otro hecho que reforzó este falso mito fue que Einstein no empezó a hablar hasta los 3 años y desde niño tenía cierta dificultad para expresarse.
3) El pelo y las uñas siguen creciendo después de que una persona ha muerto:
Los científicos afirman que cuando morimos el corazón se detiene, la sangre deja de fluir y el oxígeno deja de llegar a nuestro cuerpo, lo que detiene la producción de nuevas células y, por ende, el crecimiento de las uñas y el cabello. Cuando el oxígeno deja de llegar a nuestro organismo, se produce la evaporación del agua, que supone el 80% del contenido de nuestra piel. En otras palabras, nuestro cuerpo se deshidrata, por lo que comienza a encogerse. Así, no es que las uñas crezcan, sino que la piel que las rodea se retrae, a medida que se deshidrata, haciéndolas parecer más largas. Lo mismo ocurre con la piel de la barbilla.
4) El ejercicio es la mejor forma de perder peso:
Cuando se acerca la temporada de verano, son muchos, especialmente los que tienen algunos kilos de más en su cuerpo, los que corren a inscribirse a algún gimnasio para ponerse en forma y bajar rápidamente de peso. Sin embargo, los científicos aseguran que la manera más efectiva de bajar de peso es simplemente consumir sólo las calorías que el cuerpo realmente requiere (el cuerpo posee el llamado metabolismo basal, que es el mínimo de calorías que el cuerpo necesita). Por ello, evitar cualquier tipo de exceso alimenticio es la base para perder peso, aunque el ejercicio físico también puede ayudar bastante en este objetivo. Por lo demás, todas las dietas se basan en el mismo principio: ingerir menos calorías de las que una persona gasta. Lo único en lo que varían es en la manera de crear ese déficit.
5) El Monte Everest es la montaña más alta del mundo:
El Monte Everest, localizada en la cordillera de Mahalangur Himal, en el continente asiático, en la frontera entre China y Nepal, tiene la fama de ser la cumbre más alta del mundo gracias a sus 8.848 metros de altura. Una altura que en todo caso palidece si lo comparamos con el Mauna Kea, un volcán inactivo de la isla de Hawái que emerge en medio del Pacífico.
Si bien sobre el nivel del mar sobresalen sus 4.207 metros de altura, la mayor parte de la estructura del Mauna Kea (6.000 metros) se oculta bajo el agua. Por eso, la altura total medida desde la base submarina del Mauna Kea sería de 10.207 metros, casi 2.000 metros más que el Monte Everest.
Fuente:
•Héctor Fuentes