sábado, 27 de junio de 2015

Los insólitos pasatiempos de los líderes más sanguinarios

Hasta los líderes políticos y militares más sanguinarios, jefes terroristas o del crimen organizado, tienen sus tiempos muertos y sus modos de llenarlos. Si bien es un hecho natural, no deja de ser curioso el choque entre la imagen habitual de estos personajes y los ridículos pasatiempos a los que se abocaban, en algunos casos hasta volverlos una obsesión.
Esta es una lista de los entretenimientos o hobbies más absurdos de los líderes más sangrientos:

Stalin
coleccionaba y comentaba dibujos de hombres desnudos: el dictador soviético tenía una gran colección de dibujos de hombres desnudos, realizados por artistas rusos del siglo 19 y 20, a los que añadía, de puño y letra, comentarios subidos de tono sobre los cuerpos retratados.

Hitler
dibujaba personajes de Disney: en 2008 el museólogo noruego William Hakvaag anunció el descubrimiento de dibujos hechos por Adolf Hitler durante la Segunda Guerra Mundial; curiosamente, se trataba de retratos de personajes de películas de Walt Disney: dos de los Siete Enanitos y Pinocho.

Al Capone
escribía canciones de amor: este famoso jefe de la mafia, una de las personas más buscadas por el FBI en la historia, en sus ratos libres componía música popular amorosa; muchas de sus composiciones para voz y banjo estaban dedicadas a su mujer.

Osama bin Laden
jugaba al volley: según contó su guardaespaldas, Nasser al-Bahri, el líder de la red terrorista Al Qaeda era fanático de este deporte, que practicaba con gran habilidad.

Saddam Hussein
escribía novelas románticas: el dictador iraquí publicó una novela llamada “Zabibah y el Rey”, en la que contaba, en clave romántica, la relación de un Rey y una joven virginal, como una alegoría de su relación de amor con su país, Irak.

Kim Jong Il
era fan de Michael Jordan: el líder político y militar norcoreano era un gran aficionado al basquetbol, y su fanatismo se centraba especialmente en Michael Jordan, a tal punto de tener una colección de VHS de todos los juegos en los que participó; en el año 2000 la entonces Secretaria de Estado del gobierno estadounidense Madeleine Albright vistió Corea del norte y entregó como regalo a su líder un balón de basquetbol firmado por su ídolo.

FUENTE: Pijama Surf
Imagen: Shutterstock