sábado, 18 de noviembre de 2017

La tribu de Indonesia que creen en los árboles


Las selvas tropicales de Sumatra, en Indonesia, son el hogar de los Orang Rimba, la gente de la jungla.
Su fe y su modo de vida nómada no son reconocidos por el Estado.

Antes del Islam solo creían en espíritus, dioses y diosas, no en el dios supremo Alá . Cuando alguien moría, ni siquiera enterraban a los muertos, simplemente dejaban el cuerpo en el bosque. Ahora su vida tiene sentido y dirección"

(Antes) vivían en el bosque. Vivían el día a día. Cuando morían, morían. Pero ahora tienen una religión, saben que hay una vida después de la muerte".
Muchos terratenientes incendian los bosques para luego plantar palmas aceiteras. PA.

La población musulmana mayoritaria circundante llama a los Orang Rimba "Kubu".
" Significa que están muy sucios, son basura, que ni siquiera se pueden mirar porque son muy desagradables", explica el antropólogo Butet Manurung, que ha vivido con los Orang Rimba durante muchos años.

Rukka Sombolinggi, directora de la Alianza de Pueblos Indígenas del Archipiélago, Asegura que los Orang Rimba son una de las tribus indígenas más amenazadas en Indonesia.

Esto por la medida que sus bosques son destruidos para dar paso a las plantaciones de palmas aceiteras, muchos se ven obligados a convertirse al Islam para sobrevivir.

No entienden el concepto de robo. Dicen que la fruta creció sola en el árbol para que pueda ser tomada, pero fue plantada por alguien. Tal vez en su sistema de creencias está bien, pero no en nuestra sociedad.

El hecho de que los Orang Rimba cacen y coman cerdos salvajes también crea tensiones sociales en la comunidad musulmana. Si ven la sangre del cerdo y las sobras, se sienten perturbados", explica el oficial.
Lo que es tabú, o haram, para los Orang Rimba contrasta directamente con lo que comen los musulmanes, explica Manurung.

Los Orang Rimba no comen animales domésticos como gallinas, vacas u ovejas.
Alimentas al animal, y cuando engorda, lo comes. Lo justo es luchar. "Quien gana puede comer al perdedor ".

"Lo que queremos es que dejen de llevarse nuestro bosque. No queremos casas como las de afuera", dice Ngantap, uno de los ancianos de una tribu.

" Estoy en paz y feliz en el bosque, soy una persona de la jungla ".

Ngantap usa el taparrabos tradicional de los Rimba, con una bolsa de cigarrillos colgando del costado.
Las mujeres solteras tradicionalmente llevan pareos sencillos que cubren los senos. Una vez casadas, el sarong se ata a la cintura dejando los pechos abiertos para alimentar a los bebés. Muchas ahora usan ropa traída desde las ciudades.

Pero Ngantap insiste en que se están aferrando a su fe.
"Está mal decir que no tenemos fe. La religión es un derecho personal de todas las personas. Es muy incorrecto desacreditar la fe de alguien. Si nuestro sistema de creencias se pierde, y los dioses y la diosa no tienen un hogar en el bosque, el desastre reinará".

La esposa de Ngantap, Ngerung, dice que están conectados a los árboles desde el nacimiento.
"Cuando nace un bebé, se deben plantar tres árboles, uno para la placenta, uno para el bebé, uno para el nombre. Nunca se pueden cortar ni herir. Cuando caminamos por nuestro bosque, le recordamos a la gente esto".
Ngantap asegura que nunca dejará los bosques ni se convertirá al Islam.
Fuente:
•Bbc

Imagen:
• grupo de personas Kubu en la década de 1930 en Jambi , Sumatra .